La premisa de Shonen note me ha gustado mucho. Un preadolescente con un don para el canto, con una voz soprano que deja a todos boquiabiertos, pero con esa presión de la cuenta atrás para que su voz cambie.

Me encanta cómo Yutaka, que al principio es un niño inocente y puro sin ninguna preocupación, poco a poco empieza a sentir ese miedo que todos no paran de repetirle: tal vez cuando le cambie la voz ya no cantará bien.

La transición de niño a adolescente está muy lograda, con todo tipo de sentimientos intensos de esa etapa. Desde los celos o los cambios de humor, hasta la diferencia de madurez entre niños de edades parecidas, algunos habiendo hecho el cambio hacia la pubertad y otros siendo aún niños.

Con todo ello, veo que los personajes están muy bien construidos, sin embargo, siento que la historia a veces es muy floja, o que pasan varios capítulos sin que ocurra nada en especial. Lo que no me convence al leer historias que tratan sobre música, es que, obviamente, el formato no permite escuchar las canciones, o en este caso, no consigo emocionarme demasiado al leerla porque no puedo escuchar la voz de Yutaka.

Shonen Note es una bonita historia de transición entre la niñez y adolescencia, con todos los problemas que eso puede acarrear a un niño soprano. Con personajes bien construidos y una historia lenta pero bonita, que merece leer a pesar de su edición en absoluto de mi agrado.