– Fuse | Taiki Kawakami | Mitz Vah –
Satoru es asesinado por un hombre con un puñal, salvando a su aprendiz. Lamentando muchas cosas de su vida, su consciencia sigue activa aunque haya muerto. Sin poder ver, oler ni escuchar, su único sentido es el tacto. Poco a poco se dará cuenta de que no ha muerto del todo, gracias a una voz en su cabeza, aprenderá cómo puede ver su alrededor usando la percepción mágica y descubrirá que se ha reencarnado en un Slime, la criatura más débil de los mundos de fantasía.
Primeras Impresiones ★★★★★
Aquella vez que me convertí en Slime es una adaptación de una colección de novelas ligeras escrita por Fuse. El principio puede ser pesado o lento para algunos, sobre todo en el anime, pero en seguida verás que el Slime es alguien muy carismático y que tienes que seguir leyendo para ver lo que va a hacer en el futuro.
He de confesar que yo comencé a leer esto por las risas, porque realmente el título no me atraía demasiado. Fue un «Pfff… a ver de qué va…» y me enganchó (la verdad es que esto me ha pasado muchas veces). Me encanta Rimur, Veldra y sus seguidores. Los diseños de personajes son geniales y sus evoluciones al conseguir un nombre aún más. No puedo esperar a ver con qué me sorprenderá este Slime. Si te gustan las aventuras, los shonen y la creación de comunidades, dale una oportunidad, no te arrepentirás.
Tal y como contamos en la introducción del principio del post, Satoru se reencarna en un Slime, sin embargo, éste slime realmente no es débil. Cuenta con habilidades propias y únicas. Se despierta en una cueva, muy al fondo de ella y allí, se hace amigo de uno de las cuatro calamidades del mundo, el dragón de la tormenta Veldra. Se ponen un «nombre» en común, algo así como un apellido para grabar en su alma que son iguales. El slime sugiere «Tempest», por lo del dragón de la tormenta, simple, pero a Veldra le encanta, ¡será Veldra Tempest! Así que a cambió, él también le da un nuevo nombre se convierte en Rimur Tempest. Con la habilidad «Depredador» de Rimur, absorbe a Veldra, deshaciendo así el sello que lo tenía cautivo y se dispone a salir de la cueva.
Ésta habilidad es alucinante, pues puede analizar todo lo que haya comido y así obtener habilidades de éstos seres por ejemplo. Así, Rimur sale de la cueva a un bosque donde se cruzará con un grupo de pequeños y muy asustados goblins. Éstos le dirán que han venido porque hay un monstruo terrible en el bosque, Rimur se asusta «¿Un monstruo terrible?» pero al final resulta que es él, sin controlar el aura demoníaca que transmite y con Veldra en su interior, parece un monstruo muy amenazador. Consigue ocultar este aura y los goblins le piden ayuda. El clan de los lobos últimamente son una amenaza para su pueblo y quieren que Rimur se libre de ellos. Éste acepta y es llevado a su aldea.
Con los conocimientos que tiene de cuando era humano, crean barricadas y trampas para los lobos y al anochecer, éstos atacan. En un abrir y cerrar de ojos, Rimur vence al líder y toma su apariencia para que los lobos le presten atención… «¡Obedeced o morid!» les grita llevado por la emoción, aunque se da cuenta de que no les ha dado opción de huir… ¿y si deciden luchar hasta la muerte? Vaya cagada…
Pero los lobos se arrodillan ante Rimur y le juran lealtad. Así, lo primero que nuestro carismático slime consigue al salir de la cueva es la lealtad de una aldea de goblins y una manada de lobos. Los monstruos no suelen tener nombres y no suele ser un problema para ellos, pero Rimur sí que lo ve como algo… no muy cómodo. Es mejor que todos tengan nombre, así que se pone a nombrar a todos allí aunque el líder anciano de la aldea goblin le dice que si está seguro. ¡Pues claro! Todos los monstruos se alegran y se emocionan al escuchar esto. Llamará al anciano Rigurd, como se llamaba su hijo antes de morir, y sigue nombrando a todos hasta que de repente… su cuerpo se derrite un poco sin poder mantener su forma y entra en modo reposo.
Al despertarse tres días después, ve a una bella mujer con él… ¿Quién será? Ella cuando ve que Rimur recupera la consciencia llama en seguida a Rigurd, y entra un hombre super musculoso en la caseta donde está el slime. ¿Quién es este hombre tan atractivo…? ¡Es Rigurd! Él le explicará que poner un nombre a un monstruo requiere mucho maná y hace que el monstruo en sí evolucione a una etapa superior. Rigurd dejó de ser un goblin viejo para convertirse en un hobgoblin mazado y muy fuerte. Lo mismo pasó con los demás goblins y los lobos, convirtiéndose en hobgoblins (machos), goblinas (hembras) y lobos de la tormenta.
Todo esto tan solo es la mitad del primer tomo. Rimur poco a poco irá ayudando tanto a monstruos como humanos, creando la primera ciudad de monstruos, donde monstruos y humanos puedan vivir y relacionarse en paz. Conseguirá tanto aliados como enemigos. Un isekai bastante bien llevado y agradable.
De los muchos Isekai que he leído, sin duda uno de los mejores que sabe llevar la historia. En este tipo de mangas el principio siempre engancha pero llega un punto donde o el autor no sabe cómo llevarlo y llega a ser el típico manga de peleas o del protagonista super fuerte rodeado de chicas. Aquella vez que me convertí en Slime mantiene su esencia de crear una ciudad de monstruos y humanos, metiendo alguna que otra pelea como elemento secundario.
Ficha Técnica del Manga
Aquella vez que me convertí en Slime
- Título: Aquella vez que me convertí en Slime.
- Autor: Fuse.
- Dibujo: Taiki Kawakami.
- Diseño de personajes: Mitz Vah.
- Editorial Española: Norma Editorial.
- Precio por unidad: 8,00€.